Nota: Esto se aplica
tanto a las crisis de sanación experimentadas en tratamientos como el “Periodo
de Purificación” después de un curso Este artículo está escrito por Patrick
Hamouy de therapies.com.
Recientemente, tuve
una paciente que sufría de falta de energía, y nauseas. Su piel era amarillenta
(normalmente una señal de algo relacionado con el hígado) y estaba
continuamente de baja en su trabajo. Le di consejos sobre su dieta (que no
siguió) y sesiones de Reiki. Las sesiones de Reiki resultaron muy eficaces y me
llamó después de algunos días quejándose de que sudaba tanto por las noches que
su cama terminaba empapada. “¡Muy bien!” exclamé, “tu cuerpo está eliminando
toxinas.”
Pero para esta
señora, sudar significaba que algo iba mal. A pesar de mis explicaciones
referentes al hecho de que su cuerpo se estaba limpiando y que el sudor era
toxinas que se desplazaba desde dentro de su cuerpo hacia fuera, fue a su
médico para que le recetara un fármaco para dejar de sudar.
Quiero explicar lo
que es una Crisis de Sanación, ¡para que no cometáis el mismo error!
¿Exactamente qué es
una Crisis de Sanación?
Ocurre cuando el
cuerpo intenta liberarse de toxinas. Es un proceso natural. Puede activarse
debido a un cambio de dieta, un tratamiento de Reiki o un curso de Reiki o
incluso una liberación de bloqueos emocionales.
Básicamente, hay 5
órganos principales de eliminación que tu cuerpo usará para eliminar toxinas.
1. La piel
A medida que tu
cuerpo elimina toxinas, puedes notar un incremento en la sudoración ¡pero no
pasa nada! Lo peor que puedes hacer es usar un desodorante, porque así estás
evitando que tu piel ejerza su función natural. Si te molesta de verdad, usa un
desodorante natural que puedes comprar en una tienda de productos naturales.
Aunque menos frecuente, puede ocurrir que aparezca un salpullido o granos en la
piel.
Un alumno comentó
que sufrió un sarpullido desde la base del cuello hasta el sacro como
consecuencia de un curso de Reiki. Duró 3 días y después afirmó sentirse mejor
que nunca.
2. El Colon
Puede ser que notes
un incremento en la frecuencia de evacuaciones (ir al servicio). Un ejemplo
espectacular de esto fue uno de mis alumnos que, después de un curso de Reiki
I, afirmo haber ido al servicio 24 veces en 48 horas. Es importante comentar
que no fue diarrea, que podría tener consecuencias graves a nivel
deshidratación.
Estos síntomas, como
los anteriores, son positivos. Es una manera natural que el cuerpo tiene de
eliminar materia orgánica tóxica acumulada en el colon.
También se puede
notar un cambio en el color, olor y consistencia de las heces.
3. La orina
La función de los
riñones es de regular la cantidad de ciertos ingredientes en la sangre. Lo que
encuentren en exceso, se eliminará y será conducido a la vejiga para su
eliminación a través de la orina.
Por ejemplo:
Exceso de agua,
hormonas, sal, anticuerpos (si tu cuerpo está luchando contra una infección)
enzimas, vitaminas, minerales y cientos de otros productos serán eliminados.
Tu orina contiene
los excesos de tu sangre. Si llevas una dieta sana, habrá muy pocas toxinas en
tu orina. Si no, habrá más. Cuando tu cuerpo se purifica, cambiará el color,
olor, volumen y opacidad de tu orina. Esto es positivo. Tu cuerpo está
eliminando toxinas que no quiere.
4. Sistema Respiratorio
A medida que los
pulmones se limpian, algunas personas desarrollan síntomas parecidas a un
resfriado o gripe. Este es el sistema que el cuerpo emplea para eliminar
mucosidad y elementos que no desea mediante el sistema respiratorio.
Es un proceso de desintoxicación
y tomar medicamentos o antibióticos no ayudarán al cuerpo en su labor.
Simplemente bebe más agua de lo habitual y tómate las cosas con calma.
5. Las Emociones
Una manera muy
potente de eliminar. Llantos, risas, ansiedad, depresión, felicidad “excesiva”
y mucho más se manifiestan a veces durante una crisis de sanación.
Todo es parte del
proceso. Somos cuerpo, mente y espíritu. Intentar estar sanos ignorando uno de
estos aspectos es inútil. Si hemos acumulado muchas emociones negativas, un
tratamiento natural intentará eliminar estas “toxinas emocionales” para
ayudarnos a estar sanos. De nuevo, tu ser está tratando de eliminar toxinas,
esta vez toxinas emocionales.
“Se puede comparar a
la reforma de una vivienda. Se raspa la pintura vieja. Se llena las grietas, se
cambian las moquetas etc.”
A veces, he tenido
pacientes que han sufrido de depresiones como resultado de un tratamiento de
Reiki. Este es uno de las crisis de sanación más difíciles de tratar. Es obvio
que Reiki no causó la depresión. La depresión “estaba ahí” y estaba causando la
enfermedad del paciente. Reiki lo sacó a la superficie para poder eliminarlo.
Es de suma
importancia continuar con el tratamiento hasta que haya desaparecido la depresión
y el paciente esté libre de esa toxina tan dañina. Si la persona continúa con
el tratamiento, mejorará y se sentirá mucho mejor que antes. Si deja el
tratamiento, el proceso de sanación se interrumpe y el paciente tendrá que
superar la depresión sin ayuda, con gran dificultad.
Dolores de cabeza
Librarse de un dolor
de cabeza creado por la eliminación de toxinas es casi imposible. Reiki,
Reflexología, y otras formas de medicina
natural pueden aliviar los síntomas de forma temporal.
No hay más remedio
que soportarlo con el conocimiento que nuestro cuerpo se está purificando y el
resultado será un cuerpo más sano y más feliz.
Vómitos
Puede ocurrir aunque
es no es muy común. Una señora que sufría de Dystonia estaba presente en una
charla sobre Reiki que ofrecí una tarde. Sus síntomas eran parecidos a los de
alguien que padece de Parkinson y todo
su cuerpo temblaba de forma incontrolada.
Unos minutos después
de empezar la charla, se levantó y salió corriendo a los servicios y vomitó con
fuerza. La energía de Reiki presente en la sala de alguna forma había
desencadenado esta reacción. Quedó tan impresionada por esta reacción que
decidió recibir sesiones de Reiki.
La recurrencia de
antiguos dolores
Esto ocurre cuando
una dolencia pasada no ha sido sanada del todo. Puede ser que el dolor vuelva a
la superficie antes de ser sanado completamente y desaparecer de nuevo pero
esta vez de forma definitiva.
Fiebres altas
El cuerpo usa la
fiebre para quemar toxinas. Es un proceso muy útil y no se debe frenar al menos
que la fiebre se vuelva muy elevada.
Dolor de garganta
A veces, la manera
que tiene nuestro cuerpo de liberar toxinas nos sorprende. Mi cuerpo reacciona
muy mal a productos químicos, pinturas, alcohol y otras sustancias agresivas.
Si recibo estas sustancias en grandes dosis, el resultado es un dolor de
garganta. Mi cuerpo lo considera como un resfriado y desarrollo los síntomas
propios de una gripe.
También he notado
que un dolor de garganta es una manera que tiene nuestro “cuerpo emocional” de
desintoxicarse cuando se trata de un problema de comunicación. Yo sufría de
dolores de garganta con frecuencia hasta que me di cuenta que, aunque expresaba
sin dificultad lo que pensaba (a veces demasiado) tenía grandes problemas
expresando lo que sentía.
Estas emociones
reprimidas salían a la superficie en forma de faringitis crónica. Desde que
aprendí a decir lo que siento y no solo lo que pienso, desapareció mi dolor de
garganta y no he vuelto a tener un solo ataque de faringitis desde entonces,
hace 5 años.
Peor antes de
mejorar
Ocurre a veces que
los síntomas que uno está tratando empeoran antes de mejorar. A medida que el
cuerpo se sana, libera toxinas.
Se puede comparar a
la reforma de una vivienda. Se raspa la pintura vieja. Se llena las grietas, se
cambian las moquetas etc. Todo esto se debe hacer antes de volver a decorar.
Si miras esa
habitación durante el proceso, parece todo un desastre. Pero una vez que todo
está terminado, ¡el resultado es precioso! Algo parecido ocurre con nuestro
cuerpo. Antes de librarse de lo que no quiere, debe eliminar viejas toxinas y
limpiar sus órganos. Este proceso puede causar dolor y malestar mientras
ocurre.
Resumiendo
Si durante un
tratamiento o después de un curso de Reiki experimentas algunos de estos
síntomas... ¡enhorabuena! Estas en buen camino para convertirte en una persona
más sana y más feliz.